Pues sí, todo lo bueno se acaba y esto no iba a ser menos. Durante los últimos días en Saigón escribí poquito, la conexión en mi guesthouse era bastante mala y mis actividades callejeras más movidas. El resumen es que lo pasé muy bien. Conocí a un par de extranjeros que viven allí y que me "sacaron de paseo". Fue un auntentico placer conocer la ciudad con ellos, Guido y Gary, ambos medio españoles, así que, pude dejar de hablar inglés por unos días.
La ciudad es totalmente caótica, las motos van como locas y para cruzar hay que cerrar los ojos y rezar todo lo que sepas. Aunque ya hace años que el gobierno decidió cambiar el nombre de Saigón por Ho Chi Minh City, todos siguen llamándola Saigón. Estuve alojada en la zona de mochileros, en una guesthouse bastante agradable (y con "ascensor"!!!)y la verdad es que, para fin de viaje fue bastante relajante.
Aproveché para hacer todas las compras que no había hecho durante el viaje para no cargar con ellas y lo pasé supermegachachi :-)
Pues eso, que ahora toca superar el Jet Lag y poner los pies en Barcelona again...snifff.
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